Boku to Shinigami no Nanokakan - Prólogo
Cuando estaba en la primaria, mi profesor solía decir que
“Todo ser humano tiene algo preciado, el cual, los hará sufrir”.
Ya sea en la escuela, en alguna actividad extracurricular, con
los amigos, familiares hasta con otra persona. No importa si
eres adulto o joven, no se escapan de eso. Incluso hasta un
bebe tiene problemas, llora cuando tiene hambre o está sucio.
Ese proceso es algo natural, sin embargo, lo importante es
que sepas como lidiar con esos problemas. Nunca debes
reservarte esos problemas para ti solo, siempre plática con la
persona que más confías para que juntos, puedan resolver
esos problemas. Pero, ¿Si ni siquiera esa persona puede
resolver ese problema?
Eso es algo que mi profesor nunca me enseño.
Ahora soy un estudiante de secundaria.
Hay algo que me hace sentir miserable y por más que intento
hablar con alguien, nadie me da una respuesta.
Todo esto comenzó, en el día que la conocí.
—¡Wow! ¡Qué lindo!
Ella mostró esa expresión al ver ese Parfait de frutas.
Ahora nos encontramos en este café, por su decoración,
pareciera como si fuera un lugar lujoso. Ante la vista de todos,
se podía observar como si fuéramos una pareja más, pero
esto no es tan dulce como “ese” Parfait.
No somos hermanos, tampoco somos amigos, ni siquiera es
una compañera de clases.
No la conozco muy bien. No es que tenga ese hábito de invitar
a salir a cualquiera, aunque claro, estoy consciente de que eso
no es normal.
Es una chica con el cabello largo de color negro. Su apariencia
me recuerda a un lindo gatito. A lo mejor tiene mi misma edad
o sea menor que yo.
Aunque sea una estudiante de secundaria, si la miro de cerca,
parece más una niña que está cursando la primaria. ¿¡Tan
joven es!?
A pesar que solo es un Parfait, ella tan solo lo contemplaba
con una expresión de “Qué es todo esto”
Con solo verla, estoy seguro que le ha gustado. Sus ojos le
brillaban. Es como si estuviera en las nubes.
Después, sonrió y comenzó a hablar acerca de las flores que
estaban por el asfalto.
Han pasado tres días desde que la conozco, pero tan solo
esos días me fueron suficientes para saber, que tipo de
persona es.
Por un momento, sentí como si quisiera decirme algo, trataba
de entenderla poco a poco.
—¿Cómo es que harán esto? ¿Será un secreto de la tienda?
Si es así, ¿Crees que me lo digan?
Solo veía ese Parfait desde varios ángulos pero ni siquiera
trataba probarlo.
Tan solo salí de mi casa, entre a la tienda, pedí un postre pero
no se lo está comiendo.
Bueno, no se puede evitar. Ella no podría comérselo aunque
quisiera.
No podría ni siquiera agarrar esa cuchara y disfrutar de ese
Parfait. Porque… Ella, no es humana.
Ciertamente, ella está ahí, pero nadie podía verla, ni siquiera
podían tocarla, tampoco ella podía tocarlos. Porque ella es la
muerte. Solo yo puedo verla.
Solo yo, puedo sentir su presencia, escuchar su voz, solo yo
sé que está ahí.
La primera vez que la vi, un ángel de la muerte apareció frente
a mí y sin mediar palabra solo me dijo “Morirás en siete días”
¿Morir? ¿Yo? No me dijo nada más. Tan solo sé que me
queda 1 semana de vida.
No es que me resulte familiar, sin embargo, ya anteriormente
me había sentenciado.
Eso paso hace un año, Nii-san había muerto.
Éramos dos hermanos muy unidos. El me llevaba por nueve
años. Era muy educado y lo admiraba.
Él sufrió un accidente. El autobús en el que viajaba estaba a
punto de chocar contra un coche que se salió del carril por lo
que, al esquivarlo, se estrelló, rompiendo la barra de
contención de la carretera cayendo del acantilado. Él sufrió
una hemorragia en la cabeza debido al impacto, me dijeron
que esa fue la causa de la muerte.
De los 15 pasajeros, 12 murieron incluyendo el conductor.
Según los testimonios de los que sobrevivieron, Nii-san se
arrastró para proteger a un niño que estaba ahí, gracias a eso,
amortiguo la caída recibiendo todo el daño y salvando la vida
de ese niño.
Típico de él. Era un hombre que siempre se preocupaba por
los demás, era capaz de dar la vida por alguien más.
En todo caso, si el no hubiera hecho eso…Acaso ¿Él habría
sobrevivido? ¿Sabía que él iba a morir? ¿Él iba en ese
autobús? ¿Es posible evitar la muerte?
Dudo que él supiera que iba a morir.
A diferencia de Nii-san, yo si sabía que iba a morir.
Incluso, me dieron la opción de como quería vivir esos siete
días.
Así es, fue en la segunda mitad de septiembre. Bajo el cielo
del Otoño.
Ese día… Me encontré con una chica que resulto ser, mi ángel
de la muerte.
Comentarios para el capítulo "Prólogo"
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